TURISMO Y PROSPERIDAD, MÁS ALLÁ DEL SOL
Rafael Martínez-Cristo
“La prosperidad compartida” ha pasado de ser una frase a una obsesión del gobierno de Mara Lezama por disminuir la brecha de desigualdad en un estado como Quintana Roo que tiene muy marcadas las diferencias entre los ricos y la clase marginada.
SEGUNDO AÑO: SEGURIDAD, SALUD Y EDUCACIÓN// Análisis de Rafael Martínez Cristo
Y desde hace poco más de un año que inició su gobierno, Lezama Espinoza se ha mantenido “duro y dale”, como cuchillito de palo con el tema de mejorar la calidad de vida y la economía de quienes menos tienen, convencida que una mayor equidad, una política humanista beneficiará a todos los sectores por igual.
De ahí que la gobernadora haya tomado nuevamente la palabra en la tribuna más importante del país, como es la de La Mañanera, y frente al presidente López Obrador anunció la “Ruta Turística más allá del Sol”, a fin de generar un desarrollo más justo y equitativo, en especial en zonas rurales o de bajo crecimiento del estado.
En la capital del país, destacó que el Tren Maya traerá prosperidad, riqueza al pueblo de Quintana Roo que además de sol y playa, albergan una gran e inigualable riqueza social, cultural, ambiental y gastronómica.
“Esta ruta turística llevará a visitantes y turistas por la exuberante naturaleza del norte de nuestro estado, pasando por localidades como Pacchen, Nuevo Xcán, Nuevo Durango, El Cedral, Kantunilkin, Solferino y Chiquilá” (Lázaro Cárdenas), dijo.
Justo ahí radica la diferencia con los gobiernos anteriores (al menos con los últimos cuatro), en que ellos, los de antes, jamás voltearon hacia las comunidades más oprimidas del estado, su inversión pública fue casi nula, pero eso sí, endeudaron a la entidad de manera impresionante.
Sólo habría que recordar que en 1999, Mario Villanueva heredó una deuda que no llegaba a los mil millones de pesos (y eso que construyó la carretera Cancún-Tulum). Veinticuatro años después, el endeudamiento de Quintana Roo es de varias decenas de miles de millones de pesos, sin que se hayan realizado obras de infraestructura que ameriten mencionarlas.
El desfalco fue monumental.
De ahí la ventaja con la que hoy cuenta Quintana Roo y su gente: ¿Cuánto logrará avanzar Mara Lezama en este loable esfuerzo? No se sabe, pero lo que sí se ve es una política más humanista, más social y eso, créame amable lector, beneficia a todos los sectores, a la gente de todos los estratos.
Hace algunos años, antes incluso de que Mara Lezama fuera presidenta municipal de Benito Juárez, una reconocida periodista de Quintana Roo me dijo: “Urge que una mujer gobierne el estado”.
-¿Tanto como urgente? ¿Por qué? -Le pregunté.
“Sí, es impostergable que una mujer tome las riendas de la entidad, porque la mujer gobierna con mayor sensibilidad, y aquí es necesario que se voltee hacia a la sociedad más necesitada. Basta ya de tanta insensibilidad, de tanta atrocidad…”, respondió, y cuánta razón tenía.
Cierto es que el turismo ha generado una bonanza inmensa en Quintana Roo. Pero ya es hora de abrirle las puertas a esta actividad en otros puntos del estado, permear en todo su territorio, hasta abarcar su:
Selva, mar, historia y juventud… y al fin lograr un pueblo libre y justo bajo el sol…