LA POPULARIDAD DE MARA// Arena Blanca, Rafael Martínez Cristo

 

ARENA BLANCA

 

LA POPULARIDAD DE MARA

 

Rafael Martínez Cristo

Empecinada en emular a López Obrador, la candidata de “Juntos Haremos Historia”, Mara Lezama, se ha olvidado de la propuesta, del compromiso, habla de la trillada “transformación” que llegará a Quintana Roo, pero no dice cómo, cuándo ni dónde.

Primero los pobres, erradicar la corrupción, mis adversarios… y demás palabras y frases multicitadas por el presidente, han sido el pan de cada día en los eventos masivos (muy masivos) en este inicio de campaña.

Y la letanía de López Obrador, no la necesita.

La popularidad de la alcaldesa con licencia no obedece a AMLO, ni a Morena, ni a la 4T, no, y ni siquiera depende de si hizo bien o hizo mal las cosas como presidenta municipal de Benito Juárez. El arrastre de Mara Lezama es precisamente lo que, sólo en ocasiones, embarra de su discurso: Su historia frente a los micrófonos, apoyar a la gente como lo hizo durante muchos años.

Eso le dio fama, ese es su capital, es su principal activo.

Incluso me atrevería a decir que un plus de Mara es un don que la naturaleza le concedió: Una mirada amable y una sonrisa agradable, que genera confianza y empatía, además, claro está, una facilidad de palabra, de desenvolverse en público y frente a las cámaras que ya la quisiera el gallo más gallo de la política nacional.

Cierto, tampoco puede desdeñar el capital de López Obrador y menos en un estado donde AMLO siempre ha ganado, en una de las cinco entidades más lopezobradoristas del país, lo que dicta la necesidad de incluir sus frases en el discurso.

Pero nada más. Se trata de incluir las frases, de citarlas, mas no sujetarse a éstas. Las campañas se hicieron para que el candidato escuche, ofrezca, prometa y se comprometa a brindar solución a tantos legítimos reclamos. Eso quiere escuchar la gente, y así lo deben entender la candidata y su equipo.

Mara podrá ser una excelente comunicadora, con enormes aptitudes, sin duda, pero no es política, ni siquiera cubrió nunca tal fuente como periodista. Y es ahí donde deben entrar sus asesores.

Los tiempos de campaña son muy cortos.

¡Aguas!

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