Chetumal.- Karen Gómez Trujillo alista una denuncia ante la Fiscalía General del Estado así como con la Comisión de Derechos Humanos, en contra del Instituto Nacional Electoral (INE), instancia que la obligó a renunciar después que diera a luz, situación que considera discriminatoria y violatoria de sus derechos como mujer.
La denunciante fue contratada como capturista por la Junta Local 2 en noviembre del año pasado, con un contrato de dos meses. Aunque notificó que estaba embarazada, su jefa, Mónica del Rosario Naal Dzib, vocal secretaria del INE, le dijo que no le correspondería licencia, pero sí podría tomarse unos días.
En enero firmó otro contrato, ahora por seis meses, y un mes después, cerca del 10 de febrero, tuvo que acudir al hospital, en donde fue sometida a cesárea. Su pareja le informó al INE de lo ocurrido, y al día siguiente su jefa le exigió que se reintegrara a su trabajo, sin permitir que se tomara más días o que pudiera trabajar desde casa.
El día 15, comentó, su jefa le entrega un oficio de parte del vocal ejecutivo, José Francisco Croce, en donde le exigen su renuncia voluntaria. En caso de no acceder, se le advirtió, se le levantaría un oficio por abandono laboral. Karen Gómez aceptó, pero con tinta azul anotó que la renuncia “no era voluntaria”, como se indicaba en el escrito.
Ese día recibió el pago de su última quincena, sin ningún tipo de compensación o dinero adicional.
Después de un mes de ausencia por maternidad, Karen comenzó a revisar su caso y acudió a instancias de gobierno para denunciar lo ocurrido, sin resultado.
Primero acudió con el Gobierno del Estado, quienes le dijeron que su caso era del ámbito federal, por lo que acudió a la delegación federal, en donde le indicaron que el INE es organismo autónomo. Su consejo fue acudir con la Sala Regional Xalapa del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
Aunque ya desanimada, se dio el trabajo de solicitar la intervención de esta instancia, pero le aclararon que tampoco tienen competencia en este tema.
Ella ya había dado el caso por perdido, hasta que este mes, lo comentó de forma casual en la cuenta de Facebook de un medio de comunicación local, quien la puso en contacto con una activista feminista.
“Ahora estamos recién empezando con esto”, comentó ella. “Acudiremos ante la Fiscalía y Derechos Humanos, porque sufrí discriminación”.