Como en el juego de la pirinola o “todos ponen” o a los solidarenses “se nos va el tren”.
En el discurso pronunciado en Quintana Roo el sábado 29 de enero por el presidente López Obrador, llama la atención la nula referencia al proyecto del Tren Maya en Playa del Carmen y Solidaridad. El presidente aludió al impulso que se le dará al tramo Escárcega-Tulum y a las obras urbanas que se realizarán en Cancún. En relación al tramo 5 que va desde Tulum a Cancún, sólo dijo: “…pasará por la Riviera Maya”.
Es evidente que desde la asunción del nuevo gobierno municipal encabezado por Lili Campos, uno de los proyectos más importantes de la 4T y del México moderno se ha visto entorpecido, perjudicando directamente al pueblo de Solidaridad. Es decir, el gobierno federal con muy buen tino, aceptó cambiar el trazado; sin embargo la falta de flexibilidad y tacto político de la actual presidenta municipal de Solidaridad y la posición adoptada por varios empresarios de este municipio se hace patente en numerosas declaraciones:
“Gobierno municipal de Solidaridad prepara juicios legales para defender terrenos que le corresponden y que el Gobierno Federal pretende expropiar para desarrollo del tramo 5 norte del Tren Maya”.
“…el presidente de la Asociación de Hoteleros de la Riviera Maya, Toni Chaves reiteró que como agrupación estarán al pendiente de este proceso de expropiación y si bien los acuerdos se estarán dando en forma particular entre propietarios y gobierno federal, estarán listos para brindar el apoyo necesario a sus asociados involucrados en esta declaratoria”. (www.capitalmexico.com.mx, 30 de enero 2022)
No es extraño entonces, que en su discurso el presidente haya sido enfático en relación con dos temas: 1. No es una expropiación al estilo del Porfiriato; 2. No estamos en el período neoliberal: la especulación y el afán de lucro de unos pocos no van a detener un proyecto que traerá bienestar y desarrollo económico para todos.
También es de suma importancia en función del bien común, remarcar el contraste y las visiones diametralmente opuestas del gobierno de la ex alcadelsa, Laura Beristain, y el actual gobierno prianista en relación al Tren maya.
No sólo por el apoyo irrestricto que Laura Beristain y su gobierno le dieron al proyecto en Solidaridad, sino también por los estudios y rutas alternativas al puente elevado, que se le presentaron a los entonces directivos de FONATUR. Sin duda en Playa del Carmen, durante la administración morenista 2018-2021, el Tren Maya era un tema prioritario y fue atendido como lo merece una obra que beneficiará a miles de solidarenses.
Por el contrario, en el actual gobierno municipal juegan a la pirinola con pocos y selectos invitados, donde los mismos de siempre quieren “tomar todo” torciéndole la mano al gobierno federal para que el nuevo trazo pase por sus terrenos y venderlos a precio de oro.
Si a esto le sumamos la basura en la 5ta avenida, las concesiones amañadas, el desfiguro de la delegación de Solidaridad en la Feria de Turismo de Madrid y, sobre todo, la escalada de violencia y crímenes en nuestro municipio: acorde al Secretario Ejecutivo del Sistema Estatal de Seguridad Pública, en el municipio de Solidaridad se ha registrado la cifra record de 28 homicidios en el último mes, es indiscutible que con este desgobierno: